¡QUE NOS LO CUENTEN!

Vivir sin partidos, sin sindicatos y sin autonomías. Ese es el mensaje que se repite con cierta frecuencia últimamente desde determinados medios de comunicación. Eso ya lo hemos visto unos cuantos millones de españoles que nacimos unos años antes de la transición democrática de 1978. Se llama dictadura. Quienes piensen que eso no estaría mal, que se den una vuelta por los países que aún mantienen ese sistema y que traten de hablar de sus dirigentes como aquí lo hacen de los suyos; dentro de veinte años que nos cuenten como les fue en las cárceles de países sin partidos, sin sindicatos y sin autonomías.