¿Por qué no hacer invisible a Bildu?

Artículo publicado en Elconfidencial.com

Yolanda Barcina y Roberto Jiménez, en el Parlamento de Navarra (Diariodenavarra.es)La Comisión Ejecutiva Federal del PSOE ha prohibido al Partido Socialista de Navarra que presente una moción de censura contra la presidenta del gobierno de esa comunidad, Yolanda Barcina. Por lo que se conoce, en el momento de redactar estas líneas, la dirección federal socialista no cuestiona las razones por las que el PSN había realizado consultas para tratar de desbancar a la jefa del gabinete navarro; no se sabe, por lo tanto, si los socialistas navarros llevan o no razón cuando decidieron censurar a la presidenta. Lo que sí parece probado es que al PSOE le asusta la idea de que esa moción de censura, caso de salir triunfante, lo sea como consecuencia del apoyo al candidato socialista de todos los partidos o coaliciones en la oposición, incluido Bildu. Para quien no lo recuerde, la composición del parlamento navarro es la siguiente: 19 escaños para UPN, 9 para el PSN, 8 para NA-BAI, 7 para BILDU, 4 para el PP y 3 para IU.

El PSN no puede poner una moción de censura para no contaminarse con el apoyo de un partido ‘filoterrorista’, pero la presidenta de Navarra, con una notable minoría, puede seguir gobernando gracias a que siete escaños están en poder de Bildu

UPN gobierna esa Comunidad con un raquítico apoyo de 19 diputados sobre un total de 50. En cualquier otro parlamento democrático en esa situación ya habría naufragado porque es prácticamente imposible pensar que los demás grupos, que suman una amplia mayoría, no se hubieran puesto de acuerdo, o bien para abortar cualquier iniciativa del gobierno, o para gobernar desde el parlamento, o para articular una mayoría de gobierno que se hiciera con la presidencia mediante la censura. Esto último, absolutamente democrático, es lo que pretendían hacer los socialistas navarros por las razones de las que se hizo eco la prensa en su momento.

¿Por qué, entonces, se mantiene esta anomalía en la Comunidad Foral? El PSOE, temeroso de que la moción de censura propuesta por los socialistas navarros acabara siendo votada por un partido como Bildu, ha preferido dejar en simple denuncia las posibles irregularidades del gobierno foral antes que arriesgarse a que su imagen quede dañada por supuesta connivencia con el partido amigo de los terroristas.  A la presidenta Barcina la ha salvado, en esta ocasión, la presencia de Bildu en el parlamento navarro. Si los escaños con los que cuenta esa formación no hubieran estado en su poder, esos siete escaños estarían en manos de otras formaciones políticas con lo que la moción de censura sería una realidad y UPN dejaría de gobernar esa comunidad.

Al objeto de que Bildu fuera una fuerza parlamentaria no significativa en Navarra, lo sensato, lo razonable y lo ético sería que ninguno de los partidos constitucionalistas tuviera en cuenta la existencia de los proetarras

Así que el PSN no puede poner una moción de censura para no contaminarse con el apoyo de un partido filoterrorista, pero la presidenta de Navarra, con una notable  minoría, puede seguir gobernando gracias a que siete escaños están en poder de Bildu. Como pasa con cierta frecuencia, las dos varas de medir vuelven a hacer acto de presencia en la política española. Si los socialistas se aprovechan del voto de Bildu para desbancar a la presidenta de una Comunidad Autónoma, los socialistas serán objeto de escarnio público por parte del PP y de los medios que le apoyan, siendo acusados de anteponer sus ansias de poder a cualquier consideración ético-política. Por el contrario, si UPN sigue manteniendo la presidencia y el gobierno foral como consecuencia de la existencia de Bildu, a nadie se le ocurrirá acusar a ese partido de parapetarse detrás de un partido que apoyaba y representaba al terrorismo etarra. Pero lo cierto es que la existencia de Bildu como partido con presencia en el parlamento foral navarro es el seguro del que se valdrá UPN para seguir manteniendo el gobierno navarro.

Al objeto de que Bildu fuera una fuerza parlamentaria no significativa en Navarra, lo sensato, lo razonable y lo ético sería que ninguno de los partidos constitucionalistas tuviera en cuenta la existencia de los proetarras, de tal manera que para unos y otros, el parlamento navarro  contara, a los efectos de leer los resultados de cada votación, sólo con 43 parlamentarios y no con los cincuenta actuales si se le suma a 43 los 7 de Bildu.  De esa manera, el PSN podría presentar la moción de censura anunciada por el supuesto tráfico de influencia de la Vicepresidenta del Gobierno navarro, eso sí, haciendo salir del salón de plenos en el momento de la votación de la misma a siete diputados socialistas que neutralizaran el voto favorable a la moción de Bildu. La Presidenta debería actuar en función del resultado, contando 43 votos totales y no 50. De esa manera, la moción no tendría ninguna posibilidad de obtener la mayoría absoluta  pero el PSN tendría la oportunidad de ejercer su derecho democrático a censurar a un gobierno al que cree incapacitado para seguir gobernando en Navarra sin el temor a que el resultado se viera contaminado por Bildu.

Scroll al inicio