¿Quién controla al controlador?
Solo con que uno de los seis magistrados que votaron a favor de la constitucionalidad de la amnistía lo hubiera hecho en contra y uno de los cuatro que votaron en contra lo hubiera hecho a favor, el resultado de la votación hubiera sido el mismo, pero la apariencia de parcialidad de ese Tribunal se hubiera transmutado en imparcialidad.
Si ahora seis contra cuatro han votado como todo el mundo sabía, todo el mundo sabe que ese Tribunal no garantiza la constitucionalidad de las leyes sino la obediencia debida a sus respectivos partidos. Y así, no tenemos más remedio que preguntarnos: ¿quién controla al controlador?