Aplaudir a Franco, pitar al Rey

No tengo más remedio que pensar que a los seguidores catalanes del Barça les caía mejor Franco que don Felipe

Agustin Montal, presidente del F.C. Barcelona, en la ceremonia de entrega a Franco de la medalla de oro del club catalán.

Sería sospechoso que un partido constitucionalista apostara por romper el aislamiento al que está sometida la extrema derecha en España. Y habría que exigirle explicaciones sobre la manera en la que piensan mantener el cordón de seguridad respecto a esa derecha ultra.

No estaría mal que quienes hablan de la gente fueran capaces de explicar qué entienden por gente. Supongo que la gente es el lugar común en el que se sitúa a todo aquel que no es como el que habla. Y si eso fuera así, ¿por qué defender aquello que no tienen nada que ver con el defensor de la gente?