La mentira como hecho diferencial
«La consulta del próximo 9 de noviembre no se puede considerar la definitiva. Como no se hubiera podido considerar la que tenía la cobertura del decreto». Este es uno de los párrafos que transcribía El Confidencial el martes pasado tras la comparecencia de Artur Mas en la galería gótica del Palacio de la Generalitat. No era ninguna novedad porque unos días antes el mismo presidente Mas había declarado al rotativo estadounidense The New York Times que la consulta del 9 de noviembre está en suspenso. A su antecesor, Jordi Pujol, se le olvidó contarle a los catalanes lo de la herencia oculta en un paraíso fiscal, y a Mas se le pasó contarle a los catalanes lo de que si el Gobierno se oponía, que no habría referéndum. …