Me duele la cabeza

No sé como alguien puede exhibir orgullo por haber abandonado a su suerte a quienes quisimos engañar llevando a Afganistán las ventajas de las democracias occidentales

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.

Intolerables, insoportables, insufribles, inadmisibles, abominables, indefendibles. Cualquiera de esos adjetivos puede añadirse a las declaraciones que el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, hizo la semana pasada al diario El País. “El motivo para ir a Afganistán era impedir ataques contra EEUU y otros aliados, y durante 20 años hemos impedido que Afganistán fuera el santuario de grupos terroristas que pudieran planear y organizar atentados contra los países de la OTAN. Eso ha sido un logro significativo. El plan no era estar allí para siempre”. Seguía Stoltenberg con que “la intervención no era para proteger Afganistán”. Según el secretario general de la Alianza Atlántica, si no hubiéramos gastado tantos millones de dólares y sacrificado tantas vidas, seguramente, los atentados que hemos sufrido en Europa en los últimos 20 años hubieran sido muchos más.