PP-PSOE: un gesto por la democracia

Si al PSOE no le importa que la extrema derecha siga avanzando no tiene más que empujar al PP para que meta en su mochila la pesada carga de Vox

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Europa Press
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Europa Press

Nadie ignora que los partidos políticos han perdido peso y credibilidad en la sociedad española y, especialmente, los partidos que, como el PSOE o el PP, despiertan pasiones o fobias. Si eso fuera así –y lo parece a la vista del resultado de las elecciones autonómicas de Castilla y León– los ciudadanos de esa comunidad autónoma han debido plantearse la disyuntiva de volver a dar la mayoría para gobernar a PP o PSOE, desgastados como parecen estar por los años de gobierno y por la falta de credibilidad, o apostar por opciones hasta ahora extremadamente minoritarias o por opciones seminuevas creadas ad hoc para aprovecharse del desencanto y tratar de conducir a la región castellano-leonesa por derroteros que nadie sabe exactamente cómo serán y hasta dónde quieren llegar.